A
diario la piel de nuestra cara se encuentra sometida a diversos
factores, tales como la contaminación, el estrés o cambios hormonales, que
pueden provocar que vaya perdiendo su lozanía, haciéndonos lucir un rostro
apagado y cansado. En este aspecto, exfoliarla puede traer grandes beneficios
si se realiza de forma constante, al menos una vez a la semana.
Como Exfoliar la Cara Para ayudarte a tener un Cutis Perfecto
La
importancia de la exfoliación radica en el desprendimiento de las células
dañadas de la capa superior de la dermis, gracias a la acción abrasiva que se
produce. Esto permite que esta zona de la piel se regenere con células más
jóvenes y vitales. Además, es importante realizarla con pequeños masajes circulares
para así estimular la circulación de la sangre en el cutis, lo que ayuda a
devolverle el brillo y suavidad deseados.
Un
error que cometen muchas mujeres es utilizar los mismos productos para exfoliar
su cuerpo en general, los cuales pueden resultar muy agresivos para su rostro,
irritando y dañándolo. Esto es debido a que la piel de la cara es muy diferente
a la del cuerpo en cuanto a grosor, resistencia y PH. Por tal motivo es mejor
que adquieras exfoliantes especiales para tu cutis o elabores algunos caseros
como los que a continuación presento:
Mezcla
con Bicarbonato de Sodio con Limón
Entre
las ventajas del Bicarbonato de Sodio podemos encontrar que el grosor de sus
granitos es ideal para exfoliar la piel de la cara, realizando una limpieza a
profundidad de los poros. Por otro lado el limón, por sus propiedades
antioxidantes y antisépticas, protege contra los radicales libres y demás
agentes nocivos que circulan en el ambiente. La mezcla crea una sustancia
neutral al juntar la alcalinidad del bicarbonato con la acidez del limón, esto
ayuda a regular el PH de la dermis.
Para
su preparación mezclaremos en un recipiente con 10 ml de agua, una media
cucharada de bicarbonato con el jugo de 1/4 de limón hasta crear una
pasta cuya consistencia debe ser media, ni demasiado densa ni muy líquida.
Después sólo aplica sobre tu rostro lavado mediante movimientos circulares por
2 minutos, deja actuar 1 minuto más y enjuaga con abundante agua. Es
recomendable realizarlo de una a dos veces por semana antes de dormir.
Mezcla
de Avena y Miel
La
avena contiene una generosa cantidad de Vitaminas A y E, lo que permite que actúe
como una gran reparadora de los tejidos de la piel y protectora de los radicales
libres. Por su parte la miel también ayuda a regenerar la dermis de la cara,
además de blindarla contra las bacterias y demás microorganismos que quieran
atacarla.
La
mezcla se va a elaborar vertiendo en un recipiente dos cucharadas de avena
molida con una de miel y removiéndolas hasta crear una pasta cremosa. Esta la
untarás en la cara mediante suaves movimientos circulares durante 2 minutos,
después deja actuar la mascarilla otros 5 minutos y enjuaga. Hazlo de 1 a dos veces por semana antes
de irte a los brazos de Morfeo.
Como
puedes observar, exfoliar la cara es un proceso que no te llevará más de 10
minutos y que puedes realizar con ingredientes básicos de tu despensa, por lo
que no hay motivos para no llevarla a cabo en forma constantes y ayudar así a
tu cutis a lucir y sentirse perfecto.
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